Hola, me llamo Luis Campoy, soy psicólogo, licenciado en 2010, hice un Experto en Atención Temprana y realicé mis prácticas de Máster en ASALSIDO, o Asociación Almeriense para el Síndrome de Down. Quiero compartir con vosotros mi experiencia y mis sensaciones antes, durante y después de realizado mis prácticas en el mundo de la psicología de las necesidades especiales.Vayamos por partes:
Yo, como la mayoría de las personas que poblamos este mundo, desconocía el llamado Síndrome de Down, bueno, algo sí que conocía, las famosas definiciones que aparecen en nuestros libros de texto: "trastorno genético causado por la presencia de una copia extra del cromosoma 21 (o una parte del mismo), en vez de los dos habituales (trisomía del par 21), caracterizado por la presencia de un grado variable de discapacidad cognitiva y unos rasgos físicos peculiares que le dan un aspecto reconocible. Es la causa más frecuente de discapacidad cognitiva psíquica congénita" (Made in Wikipedia). Poco más conocía de ella.
Soy natal de un pueblo de Almería, Vera, situado cerca de la región de Murcia, en mi pueblo hay una asociación llamada ASPRODALBA, que se trata de un centro especializado en discapacidad en general, donde hay personas con Síndrome de Down, parálisis cerebral… Desde pequeños, gracias a las jornadas de puertas abiertas en nuestros colegios, hemos hecho y recibido visitas de nuestros centros educativos a ASPRODALBA, y desde ASPRODALBA a nuestros centros educativos. Este tipo de actividades, ayudan, o se supone que ayudan a la integración y normalización del mundo de la discapacidad en nuestras vidas, las personas que supuestamente llevamos la etiqueta colgada de "normales". Este tipo de actividades ayudan a realizar una breve pincelada sobre las discapacidades, pero faltaba algo más, y ese algo es la ruptura con los "Estereotipos Negativos" que tenemos sobre las personas con discapacidad, del estilo, "son especiales", "no los obligues mucho", "pobrecitos", "¿no te dan lástima?", "son los que trabajan vendiendo cupones" (sandeces, diría yo actualmente)… todo ese tipo de afirmaciones contribuyen de una manera no voluntaria, a colgarles el cartel de "impedidos", "minusválidos", o como en inglés se dice "impaired", con sus connotaciones sociales negativas que ello acarrea, y que todos conocemos muy bien. De haber conocido que ASPRODALBA disponía de Voluntariado, me hubiera apuntado, y esta experiencia que os voy a narrar a continuación seguramente se habría anticipado.
Todo comenzó a finales de 2011, cuando Apolonia, una de las mejores profesionales de ASALSIDO hizo una exposición, o como le dije yo en privado, una gran clase magistral, sobre niños/as con Síndrome de Down en el Experto en Atención Temprana de la Universidad de Almería que yo estaba cursando en aquel entonces. Apolonia fue una de las profesionales más competentes que asistió como ponente en dicho experto, nos expuso un 10% de teoría y un 90% de práctica, justo lo contrario a la mayoría de los profesionales que asistieron de ponentes al Experto. Ella trasmitía ilusión y ganas de trabajar, de hecho su frase inicial fue, "quiero que en estas 4 horas salgáis preparados para hacer Atención Temprana con niños con Síndrome de Down o cualquier tipo de discapacidad, y que no os de miedo". Aquellas 4 horas fueron muy productivas, nos mostró videos, técnicas y material de trabajo para niños/as con Síndrome de Down. En aquel momento decidí continuar con el Máster, que es la continuación del Experto y realizar las prácticas en ASALSIDO, puesto que el Experto no disponía de esta posibilidad.
Llegó el mes de Mayo de 2012, tras haber realizado algunas prácticas en psicología clínica, y haber trabajado como monitor en una ludoteca, llegaba el momento de enfrentarme a un nuevo desafío, conocer a las personas con Síndrome de Down en la misma ASALSIDO. La primera persona que conocía al llegar fue a Salvadora, otra gran profesional del centro, me mostró todas las instalaciones, organizó los horarios a los que asistiría durante las prácticas, me introdujo las nociones básicas del llamado "Síndrome de Down" y demás temas burocráticos. Ella fue mi enganche en la asociación. Así comenzaron mis prácticas, para qué engañarnos, todavía tenía esos "Estereotipos Negativos" que anteriormente he comentado, y por tanto, una de mis finalidades era romperlos.
Estaba un poco perdido, no sabía qué nivel cognitivo tenían los niños/as y adolescentes con Síndrome de Down, incluso pensamientos absurdos del estilo "de qué manera tengo que expresarme para que me entiendan correctamente". En cuestión de un par de días, me di cuenta de varias cosas, cada niño/a y adolescente es particular, cada uno/a tiene su nivel cognitivo, cada uno tiene sus habilidades, y lo que es más, me hice consciente de que minusvaloraba sus capacidades, que de lejos se parecía a los preceptos que tenía cuando entré el primer día.
Los niños/as con Síndrome de Down, son ante todo niños/as, con sus peculiaridades de niño, todavía recuerdo a una pequeña de 6 años, cuyo nombre mantengo en el anonimato, cuando me dijo una mañana, "profe, me han mordido 3 elefantes en el sobaco", una frase para enmarcarla, digna de la inventiva e imaginación de una peque. O cuando trabajábamos problemas amorosos en el taller de sexualidad con adolescentes, temas tan cotidianos como se pueden tratar con personas que tiene la etiqueta de normales, sobre todo temas de problemas de pareja, tema estrella durante mis prácticas. Es en estas pequeñas cosas cuando te das cuenta que en el fondo, no somos tan distintos, unos más listos, otros menos listos, unos más atléticos, otros menos atléticos, unos más introvertidos, otros más extrovertidos. "La esencia está en la diferencia", esa sería mi frase como colofón final de mis prácticas.
Sin duda alguna, esta ha sido una de las experiencias más gratificantes que he tenido en mi vida laboral, he descubierto un mundo, un trabajo, que de verdad, "engancha", y que sin duda volvería a repetir desde el punto de vista profesional. Observar cómo un niño o niña que la semana pasada no te dominaba el trazado, y que, a la semana siguiente te lo domina; escuchar a un adolescente decirte "gracias por el consejo que me diste", o incluso reexponerte lo que le expusiste la semana pasada en algún taller, repitiendo alguna frase tuya de manera literal, la verdad, es que, eso "te llena, o te realiza como profesional". Las prácticas me resultaran cortas, pero muy formativas, puedo decir que he roto mis "Estereotipos Negativos" sobre la discapacidad, me voy más formado como profesional, y… que "la esencia está en la diferencia", sin duda volvería a repetir. Y para aquellos futuros profesionales, recomiendo esta experiencia laboral.
No quiero finalizar mi artículo sin antes poder dar las gracias a todos aquellos profesionales que me ayudaron, enseñaron y me facilitaron mi período de prácticas, gracias a: Apolonia, Salvadora, Loli, Lola, Eva, Mati, Elena, Bea, Javi, y demás profesionales con los que he compartido algún momento de mis prácticas.
Luis Campoy